Mona Ellaithi. Sudán
29/05/2020
Mona Ellaithi, de Sudán, tiene un doctorado en Genética Humana de la Universidad Al-Neelain/Universidad de Lübeck-Sudán/Alemania. Actualmente es Profesora Asistente de Genética Humana en la Universidad Al-Neelain, Jartum. Formó parte del programa Ellas Investigan. En su centro de acogida, ‘IIS Biocruces Bizkaia‘, Trabajó sobre la “Detección de variantes comunes asociadas con pacientes sudaneses diagnosticados con trastornos del desarrollo sexual (DSD) mediante la secuenciación NGS (tecnología de secuenciación Exome y Panel)”.
La científica Mona Ellaithi prevé un recrudecimiento de la situación en Sudán
Desde el comienzo de la epidemia de COVID-19, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha recomendado medidas de protección que se deben seguir en todo el mundo. A pesar del esfuerzo realizado por el Ministerio Federal de Salud del Sudán, no todos los sudaneses han seguido sus instrucciones. Muchos no creen que el virus sea tan peligroso. Dicen que el gobierno exagera y que busca ganancias políticas. El problema es que muchas familias dependen de los ingresos diarios y les resulta difícil seguir encerrados. Además, el Ministerio del Interior ha permitido reuniones masivas y no controla las salidas de la población durante las horas de confinamiento.
El 50% del personal médico infectado
Según datos del Ministerio Federal de Sanidad de Sudán del 29 de mayo de 2020, el número total de casos, desde el comienzo de la pandemia, es de 4800, 262 muertos y 1272 recuperados. El 50% del personal médico que trabaja en el centro de aislamiento de Jartum está infectado, dos han muerto por complicaciones relacionadas con la infección del virus. Todas las unidades de cuidados intensivos y centros de aislamiento de COVID-19 están llenos y se pide a los nuevos contagiados que se aíslen en casa a menos que desarrollen síntomas críticos.
Los medios de comunicación han informado de la falta de atención para los pacientes que no son de COVID-19 por parte de los hospitales de otras patologías, pero los casos no diagnosticados a veces se tratan allí sin saber que están infectados. Las consecuencias son que el personal médico contrae el virus, el hospital cierra temporalmente para ser desinfectado y el personal médico es puesto en aislamiento.
Se prevén más contagios en zonas donde hay falta de agua
Cada día se registran nuevos casos en las diferentes regiones de Sudán. Hay familias que han perdido más de un miembro por la COVID-19. La situación en algunas zonas se prevé trágica. La provincia de Darfur está el campo de refugiados debido a los conflictos internos. No sé cuál es la situación con respecto a las medidas sanitarias contra el COVID-19 en esos campos. Se prevén más contagios en zonas donde hay falta de agua y un entorno sanitario deficiente.
Sorprendentemente, sólo el Laboratorio Nacional de Salud (NHL) está autorizado para realizar las pruebas de diagnóstico. Este laboratorio se encuentra en Jartum y todas las demás provincias le envían las muestras sospechosas. Esto podría ser la causa del retraso en los resultados y del alto número de casos registrados en Jartum. Con el aumento de los casos sospechosos, el laboratorio se ve ahora desbordado. Hay, por tanto, una enorme necesidad de contar con más laboratorios que ayuden a hacer las pruebas. Creo que si hubiera laboratorios en otras provincias se diagnosticarías más casos.
Hay que preparar la temporada de lluvias
El círculo de personas infectadas se está cerrando, y cada día nos enteramos de que un pariente o un amigo está infectado. A medida que el número de personas infectadas aumenta, nos dirigimos a una situación desastrosa.
La pregunta más importante que nos hacemos ahora los científicos es cómo podemos minimizar las pérdidas esperadas. Sin duda tendremos que prohibir las reuniones de masas y respetar las medidas de distanciamiento social.
A medida que se acerca la temporada de lluvias, necesitamos encontrar una forma de proporcionar suministros médicos a ciertas zonas del país que pueden quedar aisladas por las inundaciones durante la temporada.